8. Lea el contrato, especialmente la letra pequeña. No firme el contrato si es diferente de lo que el vendedor dijo sobre el trato. Asegúrese de que los números - especialmente sus pagos y todos los cargos y honorarios - están escritos en el contrato y coinciden con lo que el vendedor le dijo. Tenga cuidado con los complementos (vea el punto 11).
Si algo dice que se lleva el auto "tal cual" o "sin garantía," significa que ellos no tienen que arreglar nada. Si el auto falla al día siguiente, usted tiene que pagar para arreglarlo. Si pidió dinero prestado para comprarlo, tiene que seguir haciendo pagos.
9. Obtenga su préstamo de auto de su banco o cooperativa de crédito. Cuando financia un préstamo de auto con el concesionario, el concesionario a menudo gana dinero con el préstamo, especialmente si le venden el préstamo a una tasa de interés más alta. Un banco o cooperativa de crédito local puede darle una tasa de interés más baja.
10. Si usted obtiene su préstamo del concesionario, pídales que pongan por escrito que le están dando la mejor tasa de interés para la que usted califica Y que no reciben ningún dinero del prestamista. Pídales que firmen y pongan la fecha en este papel.
11. Los concesionarios tratan de ganar dinero extra vendiendo productos o servicios adicionales. Estos pueden ser cosas como seguros de crédito, contratos de servicio, garantías extendidas, cobertura de GAP o contratos de mantenimiento. Por ley, usted no tiene que obtener ninguno de estos para comprar el auto. Por lo general son demasiado caros y a menudo no le ayudan mucho cuando lo necesita.
12. Obtenga los documentos del título (de propiedad) cuando compre, no después. Esta es la ley. No le pague al vendedor hasta que usted vea el título. Esto hace que sea más difícil para alguien que no es realmente dueño del auto venderlo.
13. Pregunte si hay un chip de corte de encendido. Algunas compañías financieras ponen controles remotos que impiden que el auto arranque si se retrasa en los pagos.